Para bien o para mal, te sigues viendo igual de bonito.
Y es que no necesitas decir absolutamente nada...
Creo que ya te has dado cuenta, mejor que nadie, que estoy ligeramente lastimada.
Y si tengo miedo, tú deberías tenerlo también, el miedo siempre es bueno cuando se le tiene con medida.
Tengo miedo, y por eso no te voy a soltar... Porque tengo miedo de que si te suelto, lejos te vayas a escapar;
Tengo miedo, y por eso te voy a cuidar... Porque aunque no te suelte, no tengo la certeza de que una estupidez mía no te haga quererte marchar.
Y si tengo algo para dar, ten por seguro que si es bueno, será siempre para ti.
No se encadena mi corazón a tus pies.
No te ofendas, para mi resulta mejor un amor que se sienta libre, a uno que se sienta encarcelado...
No se encadena mi corazón a tus pies; Pero si mis instintos a tu pupila...
Porque así lo quise; Pero si me encadeno más, ¿que será de mi si un día te vas? más vale prevenir que lamentar...
Aunque no puedo defenderme mucho, creo que estoy encadenada desde hace rato y ni cuenta me había dado.
Lo malo es que es un arma de dos filos;
No me conoces bien aún, puede que si digo un arma de dos filos, hable de mí...
Conmigo, hay muchos imposibles, si se trata de ti, todo es irremediablemente posible, vaya, probable.
Que para este caso, sabemos que posible es un sinónimo de probable, sin embargo, puedes probar muchas cosas conmigo y a eso me refiero, si es que me entiendes.
No me arrepentiría después, si en determinado momento te fueras, de contigo haber estado, el arrepentimiento vendría si después de algún tiempo regresaras diciendo que me has engañado.
Yo te perdono todo, menos una mentira... Pero cómo confío en tu criterio, quiero confiar en que no me mentirás, y pase lo que pase, quiero que sigas pensando igual...
De mí; No soy una mentirosa, y nunca lo fui.
Y que lo que te digan se te salga en mil suspiros; Que para palabras chocantes, oídos con frenos.
PD: Te Amo.
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